Tres chefs premiados con estrellas Michelin, el estreno de la primera chef mujer a bordo —que cocina a dos manos con otra estrella en ascensión— y el esperado regreso a tierras lusas de un auténtico maestro hacen que el tren Presidencial regrese a los carriles que cortan el Duero, reafirmándose como la mejor experiencia de lujo de Portugal.